El actor falleció el sábado a los 84 años, dejando más de un centenar de montajes teatrales y películas. Encarnó a Don Juan de Borbón en la miniserie televisiva ‘23F: El día más difícil de un rey’.

Deja una dilatada carrera en el teatro y el cine. José Tamayo con su compañía ‘Lope de Vega’ y Adolfo Marsillach en la Compañía Nacional de Teatro Clásico, fueron sus mentores escénicos más importantes.

Aunque nació en Ávila, se formó en el Institut de Teatre de Barcelona. En la gran pantalla debutó en 1956 con la película ‘La justicia del Coyote’, de Joaquín Luis Romero Marchent. En el cine ha trabajado a las órdenes de directores como Juan Bosch, Mario Camus, Julio Medem o Alejandro Amenábar.

A finales de los años cincuenta ya era habitual verle en los escenarios teatrales de la capital, donde interpretó ‘La rosa tatuada’ (1958) a las órdenes de Narros, o ‘Deseo bajo los olmos’ con Nuria Espert. Con José Tamayo se hizo todos los clásicos del teatro y le valió para que Adolfo Marsillach dijera, refiriéndose a él, que ‘ya había nacido un clásico’.

Una faceta poco conocida de su actividad profesional fue la de promotor de espectáculos de flamenco, con gran aceptación sobre todo en Italia.

A la televisión llegó en los años setenta. Una de sus interpretaciones más recordadas fue la personificación de Don Juan de Borbón en ‘23F: el día más difícil de un rey’.

También se ha dedicado a la dirección escénica, pudiendo mencionarse ‘Violines y trompetas’ (2000), de Santiago Moncada.

Con una imponente presencia y una gran voz, Palenzuela hizo creíbles todos los géneros en los que participó.

Saturnino Palenzuela Miguel nació en Ávila en 1933 y falleció en Madrid el 3 de junio de 2017.